La receta de hoy es un entrante ideal para la cena de fin de año; es muy fácil de preparar y está riquísima.
Lo primero que tenéis que hacer es lavar una lechuga, secarla bien y trocearla. A continuación ponéis un poquito de lechuga en copas individuales.
Ahora partís en trozos pequeños piña natural (también vale piña en conserva, pero la natural queda más rica) y lo ponéis encima de la lechuga.
Y ahora el ingrediente estrella: la salsa rosa. Esta salsa se prepara con seis cucharadas de mayonesa y cuatro cucharadas de ketchup, las cantidades varían, lo importante es que la mayonesa tenga color rosado. Una vez tengáis estos dos ingredientes bien mezclados, poned en la salsa unas gotitas de naranja, un poco de sal y pimienta blanca. Mezclad bien y colocad dos cucharadas de salsa en cada copa.
Por último tenéis que colocar el ingrediente que da nombre a la ensalada: las gambas. Para que la receta os quede perfecta, lo mejor es mezclar gambas cocidas y peladas con langostinos cocidos (más grandes y sabrosos).
Finalmente metéis las copas a la nevera para que se enfríe y ya tenéis un entrante ligero, rico y fácil de preparar.